Cultura

Noche mágica

Las leyendas mágicas tal vez sean solamente eso leyendas.

Para cederlas a modo de cuento de padres a hijos. Sin embargo, hay quien afirma, que las hadas y todos los habitantes del reino mágico habitan entre nosotros; en el corazón de todo aquel que mantenga la inocencia y conserve su espíritu puro y libre.

Creer que existen, es creer en un mundo fantástico en el que cualquier sueño puede hacerse realidad, por ese motivo, los artistas veneran a sus musas y a ellas imploran ese momento especial de inspiración.

La leyenda del Dios Sol, es tan antigua como la humanidad misma.

Cada año, en el hemisferio norte, el 21 de junio se celebra el día más largo, donde el poder del lado oscuro tiene un corto reinado.

La potestad mágica suspira entre el cemento, deslizándose por las calles y elevándose hasta el firmamento.

El pórtico tridimensional donde moran las deidades de la naturaleza, se expande al mundo terrenal filtrándose entre los vórtices de metal, aire y fuego.

El cielo se encuentra con la tierra en el mayor de los intermedios: La media noche,

y lo superior se une a lo inferior dejando fluir libremente toda la fuerza mágica latente.

Las leyendas fantásticas cuentan que la víspera del 24 de junio, el portal de lo oculto se abre de par en par, y en el más allá los espíritus fluctúan con total libertad por las dimensiones paralelas.

En la Noche de San Juan, las hogueras iluminan la faz de la luna con alegría, que brilla altiva en un firmamento colmado de sueños, deseos y esperanzas.

Los mortales danzan alrededor de las hogueras para purificar su alma y protegerla de diabólicas influencias.

Es la noche de las brujas, la noche de los conjuros y sortilegios, donde el diablo camina suelto.

Lo sobrenatural envuelve al planeta con su maravilloso manto de estrellas y tan sólo hacen falta una vela rosa, dos almendras y agua de azahar para conseguir la armonía con tu pareja.

Tradición popular, tradición religiosa y culto pagano se cogen de las manos para bailar alrededor del fuego, convirtiendo la noche en santificada y bendita sin perder por ello un solo ápice de su maravillosa aura mágica.

En una festividad tan fantástica les deseo una velada repleta de poder y encantamientos, donde después del paso del tiempo tengan una bonita fábula que contar a sus nietos.

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.