BenjamÃn León nació en la ciudad de La Serena en 1974, es Profesor de Castellano y FilosofÃa, por la Universidad de La Serena. Dirige las Jornadas Internacionales de Estudios Mistralianos, proyecto que cuenta con la financiación del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes del Gobierno de Chile. Coordina la Revista de PoesÃa Espantapájara, publicación literaria que distribuye simultáneamente en Chile y en España.
Ha publicado “Tankas de Pájarosâ€, Ediciones del 4 de agosto, Logroño, España, 2008; “La luz de los metalesâ€, Diputación de Cáceres, España; “Para no morirâ€, Turandot Ediciones, Sevilla, 2012.
Su obra ha sido recogida en distintas publicaciones antológicas y revistas en Chile y el extranjero. Entre otros reconocimientos ha recibido el del Tercer Premio del Concurso Nacional de PoesÃa Óscar Castro Zúñiga en el año 2005, donde figuraban entre el jurado los Premios Nacionales de Literatura Miguel Arteche y Alfonso Calderón.
En 2008 recibió la Beca de Creación Literaria, que le entrega el Consejo Nacional de la de Cultura y las Artes; y el año 2009, con la obra “La luz de los metales†(Premio de PoesÃa Flor de Jara) de Cáceres, España. De dicha obra, el Premio Nacional de PoesÃa, Antonio Colinas, como Presidente del Jurado, destacó la presencia de «la cultura, la metafÃsica y el pensamiento» en sus versos que calificó como «muy musicales» y con «un gran sentido del ritmo». El mismo año 2009 obtendrÃa el XI Premio de PoesÃa de los Juegos Florales de Vicuña Gabriela Mistral; siendo asà el único escritor nacido en su región que ha recibido este prestigioso certamen nacional de Chile.
Y este año 2013, ha recibido el XXXIII Premio Hispanoamericano de PoesÃa Juan Ramón Jiménez.
BenjamÃn León es gestor cultural en diversos proyectos relacionados con las artes, la educación y el desarrollo comunitario.
Pero ciñámonos ahora al libro “Para no morir†que ahora tenemos en la mano.
Rainer MarÃa Rilker, el poeta que BenjamÃn admira con ardor, dijo algo quizás para algunos demasiado sorprendente: “La poesÃa no es cosa de sentimientos, sino de experienciaâ€.
Los muchos que viven intensamente la poesÃa, es posible que no estén de acuerdo ni en la forma ni el fondo con esta frase rilkiana. Y a las pruebas nos remitimos, pues “Para no morir†es un libro intenso, elegÃaco, marcado por el dolor y en el que se hilvanan poemas de una hondura infinita.
Y si la poesÃa es experiencia -que lo es-, aunque no creo que anteceda a los sentimientos, ni que nuestro autor se haya hecho a la casi todavÃa edad de 39 años con tal número de premios y publicaciones de poesÃa. Y si asà fuera, ¿qué se dirá de él cuando salga de la imprenta el flamante XXXIII Premio de PoesÃa Hispanoamericano Juan Ramón Jiménez que acaba de obtener? ¿Qué dirán?, ¿qué diremos?, ¿hasta dónde llegará la fortuna y la fuerte consistencia de poeta?
Ciertamente, si cuando leemos el poema “Para no morirâ€, cuyo tÃtulo ha sido tomado prestado del propio tÃtulo del libro, nos damos de lleno con una buena poesÃa:
“Si para morir / formamos la palabra / y hacemos de su pulso / el cuerpo en la ceniza, / a qué terrible muerte nos alzamos, / a qué lugar del aire / orlamos con gorjeos hondos / para ascender al tiempo… Y acaba el poema con estos bellos versos: La noche y su destiempo. / La ausencia renacida. / La sumergida luz. / El paso de los años bajo el césped. // Jamás nace el poemaâ€.
La modulación de tiempo y espacio. La poesÃa en el corazón. El fondo filosófico a flor de luz, y la forma. Lo inacabado aunque termine.