Cultura

ProtAgonizo: el desnudamiento de la existencia

Escenarios, 11

PROT AGONIZOO el strip-tease del alma, como denominó un experto el espectáculo que Ester Bellver ha ofrecido el pasado fin de semana en el Teatro de la Estación, titulado ‘ProtAgonizo’. Una actriz amanece desnuda a la existencia, como todos los humanos. En un momento de su vida adulta, retrotrae la mirada hasta su infancia y comienza a recorrer su trayectoria por los diversos escenarios que ha transitado.

Los tres espejos del escenario le devuelven una imagen, a veces distorsionada, de lo que es, de lo que fue y de lo que quiso ser. Le envuelve la duda sobre su verdadera identidad: “Esa no soy yo”, confiesa desolada en un momento de la interpretación.

La trama es una sucesión acumulativa de situaciones conectadas por el hilo de una existencia inevitable e ineludible. El espectador asiste perplejo y admirado al desfile de sensaciones, ideas y emociones que la protagonista proyecta sobre todos los presentes, convirtiéndose ella misma en espejo de quienes atienden sus palabras y escudriñan sus gestos. Su dominio de la escena es total y los recursos de aproximación al público los domina la perfección.

Los textos han sido elaborados por la misma intérprete, que tuvo una particular vinculación con el filósofo y dramaturgo Agustín García Calvo, cuyos escritos han dado también origen a un nuevo espectáculo que posiblemente podamos contemplar en Zaragoza dentro de unos meses. Los de ‘ProtAgonizo’ están diseñados como una llamada de atención para alcanzar ciertas profundidades no ordinarias de nuestra existencia, que a menudo nos pasan desapercibidas o desatendemos a causa del ajetreo que nos rodea y nos aliena.

PROT AGONIZO, 2Hay frases lapidarias como “No dejo hijos para vuestra esclavitud” y gestos entrañables que conmueven las fibras más profundas de la sensibilidad. El espectador no llega a establecer claramente si la actriz reside en el escenario o entre las butacas.

Lo que sí parece obvio es que Ester Bellver consigue introducirse en la conciencia de quienes la contemplan a través de cada una de las reflexiones, cada una de las miradas y cada una de las sonrisas que provocan sus historias, sus recuerdos o sus experiencias.

La identificación queda clara en el final del texto: “Rompo en mil pedazos el cristal de mi máscara y me dejó caer, rota y desecha, en mil estrellas, ¡en mil caritas!, la tuya, la tuya, la tuya… que brillan en el oscuro de un viejo teatro”.

Con su ‘ProtAgonizo’, Ester Bellver nos convierte en protagonistas a cada uno de nosotros.

Sobre el Autor

Jordi Sierra Marquez

Comunicador y periodista 2.0 - Experto en #MarketingDigital y #MarcaPersonal / Licenciado en periodismo por la UCM y con un master en comunicación multimedia.