Entonces, la idea de las relaciones económicas del PP es el libre mercado y los postulados clásicos de la teorÃa económicas, como muchas veces he nombrado, desde León Walras, Adam Smithy politólogos como Hayek o Friedman.
El PSOE, como partido, en teorÃa de la ‘izquierda‘ se opone a la visión económica descrita anteriormente pero no propone ninguna nueva, salvo reformas insostenibles dentro de la economÃa actual, insostenibles a largo plazo porque tienen carácter coyuntural y son válidas en contingencias determinadas de perÃodos de expansión. Como sabemos que los ciclos del capitalismo son ineludibles por la forma en que está planteado, los perÃodos de contracción de la economÃa se ensañan con las reformas socialistas porque ya son insostenibles para el equilibrio buscado en las relaciones económicas. Hay que señalar el apego de los socialistas por la tesis de Keynes pero, en la práctica no se ha empleado correctamente y encima se está ganando mala fama por los errores de interpretación y aplicación de la teorÃa general de Keynes.
Regresando a la actualidad, el PSOE ha hecho y está haciendo autocrÃtica [2] más allá de decidir quién será el nuevo lÃder. Efectivamente, el lÃder puede esperar porque un lÃder sin ideas es carne de cañón de un fracaso, un lÃder ha de tener ideas y una base donde actuar y conducir a su grupo.
No me importa ahora si es Carme Chacón o es otro miembro del partido quien ocupa tal lugar. Deben luchar por salir de la ‘irrelevancia polÃtica’ producida por el varapalo de las elecciones donde han alcanzado la cuota más baja de escaños en el congreso desde los comienzos de la democracia [3]. Asà que la asignatura pendiente de los partidos, en general, de la ‘izquierda’ es buscar esa infraestructura económica, atenerse a un modelo económico (de los cuales hay muchos) y defenderlo ya que el modelo económico cuando funciona es el que permite hacer el resto de las reformas -todo requiere dinero-, por tanto, es el pasaje hacia una etapa de ‘cambio’ real y no hacia ideas vacÃas por ser imposibles, en su contenido, se ser introducidas en la reales más allá de los pensamientos abstractos de las utopÃas.
Si es sorprendente como los ex altos cargos socialistas han reivindicado que algo se hizo bien en la etapa de ZP [4], lo cual es más bien poco. No es por nada pero los cambios bruscos de gobierno y el no ponerle freno a la burbuja son los andamios de la destrucción de la economÃa. ZP aprovechó muy bien la primera legislatura donde tiraba de la economÃa la inmobiliaria para obtener buenas cifras pero todo lo que sube baja y las leyes de la fÃsica respaldadas por la newtoniana gravedad han hecho su homónimo en la economÃa. De modo que ha quedad, en consecuencia, un partido resquebrajado, sin personalidad o con un trastorno grave de personalidad y sin aportar nada nuevo a la democracia ni al juego polÃtico en la situación difÃcil actual [5]. El programa, asimismo, de Rubalcaba no estaba sustentado por teorÃa ni praxis polÃtica-económica real sino por el mero hecho de saberse como perdedores y poder ejercer con algo, el contrapeso a la polÃtica neoliberal pero, repito, vacÃa en sà de contenidos aplicables a la realidad.
Esperemos que alguien tome las guÃas en conciencia de una alternativa eficaz, con un modelo de base realmente revolucionario y aplicable como muchos propuestos por distintos economistas y profesionales de las ciencias sociales, ya sean Stiglitz, Krugman, Vicenç Navarro, José Luis Sampedro, etc.