¿A dónde nos llevarán los pedregosos caminos que transitamos estos días?
¿Hacia qué lugares nuestros corazones se verán obligados a volar?
El inocente paga el precio, el culpable impune queda al final
Y el que ama sin medidas, traicionado queda ya
Bajo la cuesta que me conduce a ser mediocre
Es más cómodo pasar por el aro, que pensar por mí mismo
Y si un ápice de lo auténtico que soy me pervierte
Para encauzarme llegan las reglas
Ciudadano perfecto, ciudadano ejemplar que se agacha
Ante el imperativo mandato del despotismo ignorante
Que se piensa ilustrado
Ciudadano que crees en cuanto se te muestra a diario
No cuestionas las cosas porque estás muy tranquilo
Y aun sin llegarte el sustento para alimentar a tus hijos
Agachas el lomo y recoges las sobras
Ciudadano que piensas soluciones en bares
Parroquianos que arreglan el mundo bebiendo cerveza
El ideal termina cuando cruzan la puerta
Que de nuevo les posa en sus tristes hogares
El trabajo una mierda, el jefe te exprime
Pero en casa tienes el perfecto sparring
Ni una queja le aguantas pues ya tienes bastante
Y al mínimo gesto le cruzas la cara
El niño que llora mientras devora la escena
Se cree que su padre es un monstruo sin alma
Y entre lágrimas escucha sollozar a su madre
Ese ser que no entiende de qué es culpable
¿A dónde nos llevarán los pedregosos caminos que transitamos estos días?
¿Hacia qué lugares nuestros corazones se verán obligados a volar?
El inocente paga el precio, el culpable impune queda al final
Y el que ama sin medidas, traicionado queda ya