Dicen que cada vez hay menos líderes en el mundo para admirar, respetar y seguir, que es difícil encontrar héroes, yo diré que no, que siempre existen y se encuentran en los lugares menos esperados, los hay conocidos, famosos y otros anónimos, ellos son los que hacen que el mundo cambie, que se dejen viejas estructuras y que se innove para transformar o mejorar un grupo social, una persona, una cosa.
Hoy quiero contarles de uno que es muy conocido en Colombia, en Hispanoamérica, Estados Unidos, reconocido escritor y maestro de la literatura colombiana e Hispanoamericana, nos ha entregado en sus 80 años de vida que cumple el próximo 12 de octubre, más de 50 libros, ha ganado premios, reconocimientos de distintas entidades muy importantes nacionales e internacionales. Con una visión del mundo y del ser humano que nos proyecta en sus textos y en su poesía, con tal conocimiento, sensibilidad y sabiduría que cuando se lee a Fernando Soto Aparicio es inevitable dejar de leerlo jamás. Sus libros han sido material de estudio en las aulas de los colombianos durante décadas dejando una huella marcada de conocimiento, de reflexión y de una actitud positiva, sin dejar de ser crítico siempre invitando al crecimiento, al amor, a la esperanza, a todo lo noble que puede tener el ser humano.
Fernando Soto Aparicio, el escritor, es un artista talentoso, con capacidad de escribir novelas, cuentos, poemas, ensayos, literatura infantil y juvenil, guiones para cine y televisión, ha alcanzado en su vida todo lo que una personalidad de su talla puede tener, gracias a su talento y trabajo. Admirable ya de por si, tiene algo más que lo convierte en líder positivo para el mundo, alguien a quien admirar y seguir, un modelo para los niños y para los jóvenes porque este escritor no solo tiene talento, tiene carisma, transparencia y mucho amor que transmite en cada proyecto; como persona comparte, apoya a otras personas sean famosas o no famosas, sin importar procedencia, o edad siempre está abierto a impulsar sus iniciativas, cuenta con una sencillez y humildad características de la verdadera grandeza.
Hoy, en sus 80 años tan bien vividos, llenos de frutos de los que podemos disfrutar quienes leemos sus letras y quienes podemos tener cualquier tipo de contacto con él, cabe decir a quienes no le conocen que se acerquen, ahí tienen un verdadero ejemplo de lo grandioso que puede llegar a ser una persona humana cuando la impulsa el motor del conocimiento sumado al amor.
Les dejo estas palabras que recientemente el maestro Fernando Soto Aparicio ha compartido:
“Y sin embargo, ahí en esos trozos de un caprichoso caleidoscopio estoy yo, con lo que hizo y deshizo mi vida. Soy responsable de las cosas que hice y también de las que dejé de hacer. Quizás lo único que pueda alegar, no para justificarme sino para explicarme, es que tengo la certeza de que seremos mejores si permitimos que en el corazón nos crezca el amor, compañero inseparable de la esperanza.”
Lectores del mundo con Fernando Soto Aparicio