Consonancias, 17
Vuelve la ópera al Teatro Principal de Zaragoza
Es satisfactorio comprobar cómo la afición a la ópera entre el público zaragozano no sólo se mantiene sino que se incrementa. Un índice revelador es que en la sesión del pasado 27 de octubre, en la que se representaba ‘La Traviata’, de Verdi, por la compañía del Teatro de la Ápera Nacional de Odessa, había bastante público joven en el patio de butacas e incluso en los palcos.
Con el aforo completo, la representación discurrió por cauces bastante convincentes, apoyada en una orquesta solvente bajo la dirección de Igor Chernetski. La interpretación estelar de la soprano Anastasia Golub, en el papel de Violeta, fue lo más destacado. Estuvo bien secundada por el tenor Oleg Zlakoman, como Alfredo Germont, y por el barítono Ventseslav Anastasiov, como Giorgio Germont. Precisamente el aria ‘Di Provenza il mar, il suol’ de este último, figuró entre lo más florido de la noche, sin desmerecer en absoluto los papeles de los protagonistas. La escenografía fue suficiente, aunque mejorable, y la intervención de los personajes secundarios y del coro resultaron aceptables.
Las compañías ucranianas, que han ido elevando la calidad de sus actuaciones en los últimos años, se adaptan a espacios de mediana dimensión, como el de nuestro Teatro Principal, en el que las escenas colectivas quedan un tanto apretadas. Aceptadas estas limitaciones, podemos estar satisfechos de la programación que periódicamente se nos ofrece. Al día siguiente, el domingo 28, se interpretó ‘Rigoletto’, de Verdi, por la misma compañía, que ofreció una consistente representación por cauces similares a los del día anterior.
La próxima sesión operística será el miércoles 7 de noviembre. Ya están los aficionados con las localidades en la mano para asistir a la representación de la ópera ‘Carmen’, de Bizet, que correrá a cargo de los solistas y coros de la compañía Opera 2001, con la colaboración de la Orquesta Sinfónica de Pleven y del Ballet Español de Carmen Matilde Rubio, bajo la dirección musical de Martin Mázik.