La Virgen del Monserrate, patrona de Orihuela

El día 8 de septiembre, como cada año, se celebra la festividad de la Virgen de Monserrate en la ciudad de Orihuela, excelsa patrona de esta ciudad en el año 1633 y hasta la actualidad.

Su historia se remonta a principios del siglo VI, aunque no se sabe exactamente quien o quiénes la trajeron a Orihuela, ya que hay varias tradiciones con distintas versiones sobre lo acontecido. Lo que está claro es que durante la invasión árabe fue permitido seguir adorándola gracias al “Tratado de Capitulación del Rey Teodomiro al árabe “Abd al Aziz”. Este privilegio se abolió tras la llegada al trono del árabe Abd al Rahman I en el período 790-800, por lo que la Virgen fue escondida en una cueva de la sierra de Orihuela.

Una vez pasados unos 400 años, durante la noche del 16 al 17 de julio de 1242 se reconquistó Orihuela, gracias a la participación y confidencias de la “Armengola”, figura emblemática de la ciudad de Orihuela por este mismo motivo. Hablaremos de forma más extensa sobre la Armengola en otra ocasión.

Tras la expulsión de los árabes de la ciudad, los creyentes y devotos cristianos, conocedores de las antiguas historias y tradiciones, comenzaron la búsqueda de la deidad durante 60 años. La Virgen estuvo oculta durante más de 450 años. Hasta que en el año 1306, como cuenta la tradición, se oyeron repliques de una campaña en el monte durante 3 noches consecutivas. Los fieles acudieron hasta ese punto y comenzaron a excavar, encontrando la escultura en el interior de una cueva bajo una campana. Tras este “milagro”, se debatió sobre el nombre que habría que adjudicarle a la Virgen, siendo el de Monserrate por su antiguo significado -monte aserrado-.

Sus fiestas se centran principalmente en las misas y, sobre todo, en la romería de la Patrona por la ciudad. El itinerario empieza el día 5 de septiembre en la Iglesia de Monserrate, hasta la Catedral, donde se le darán los rezos durante una semana. El último día de esa semana se realiza el camino inverso para devolver a la Virgen a su Iglesia.  Durante dicha semana, fuera del ámbito religioso, el Ayuntamiento organiza diversas actividades, tales como hinchables, obras de teatro infantil, conciertos, etc.

Como dato curioso, durante la Guerra Civil la imagen fue quemada. Fue restaurada respetando la original, al instaurarse la paz de nuevo. Con una pequeña diferencia: la antigua estaba de pie y esta se encuentra sentada en un trono, como símbolo de respeto.