Con relación a la manifestación del 9 de abril convocada por algunas asociaciones de vÃctimas del terrorismo de ETA, el pasado 27 de febrero en mi escrito titulado «De cómo el periódico El Mundo manipula el 11-M» (lo pueden leer en numerosos periódicos digitales), anticipé lo que sucederÃa. Dije entonces: «Yo no voy a picar en el anzuelo. No creo necesario repetir que estoy contra ETA. Sà creo necesario decir que no estaré en esa pretendida «manifestación conjunta del 9 de abril» en la que entre dirigentes y manifestantes del PP se verán las mismas pancartas fraudulentas sobre el 11-M que hemos visto en manifestaciones anteriores. No voy a contribuir a la ceremonia de la confusión a la que El Mundo y el PP quieren llevarme».
Y asà fue: pancartas y alusiones al 11-M, –¿quién ha sido?, queremos saber»â€“ enjabonaron los oÃdos de los dirigentes del PP durante el recorrido.
De no ser por la gran tragedia que los atentados han supuesto, lo de El Mundo y el PP sobre el 11-M es de risa; dirÃase que están haciendo una representación a la altura de los sainetes de Carlos Arniches. Pero el drama humano que los atentados del 11-M ha supuesto convierten la representación de El Mundo y el PP en un esperpento digno de las mejores obras de teatro de Ramón MarÃa del Valle-Inclán. Al hilo de esta reflexión sugiero la lectura del breve, pero magnÃfico, artÃculo de José Yoldi que les expongo a continuación:
http://www.elpais.com/articulo/espana/Cambio/billetes/euros/elpepiesp/20110314elpepinac_9/Tes?print=1