En la guerra de los sexos, uno de los frentes de disputa más activos es el manejo del dinero y, en concreto, de las inversiones.
Según sostienen estudios de la economía conductal, en termino generales los inversores hombres a la hora de tomar decisiones financieras son más analíticos y están dispuestos a tomar mayores riesgos. En cambio las mujeres, al no pretender rendimientos exagerados de un día para el otro y valorar mas el largo plazo, tienen un mejor promedio en el rendimiento de su cartera de inversiones.
Esto demuestra que sin duda, los hombres son más propensos a tomar riesgos y a sobrestimar su capacidad para tomar las mejores decisiones (de inversión o cualquier otro tipo) y que las mujeres priorizan el largo plazo. ¿Esta mal esto? De ninguna manera, cada uno tiene su estrategia. Pero entonces ¿Quien es mejor?. La única manera para determinar esto y que el debate no se torne interminable, es definir primero que se entiende por «un buen inversionista».
Los expertos consideran que un buen inversionista, como mínimo, tiene que tener las siguientes características:
Paciencia: Invertir en renta variable sólo es rentable con horizontes largos, ya que sólo así se puede bajar de forma importante el riesgo sistemático y minimizar el impacto de las comisiones.
Diversificación: Cualquier inversionista patrimonial debe invertir su dinero en diferentes tipos de activos, de tal forma que los imponderables de uno sean compensados por las gratas sorpresas en otro
Humildad: Incontables estudios confirman que es muy raro que alguien le gane al mercado de forma consistente.
¿Entonces? Como los estudios indican que los hombres realizan un 45% más de transacciones bursátiles que las mujeres, esto se refleja en retornos netos inferiores ya que se generan muchos mas gastos en comisiones. Por eso las mujeres, gracias a su humildad y paciencia, resultan mejores inversores que los hombres en el largo plazo.
Igualmente, los mismos estudios indican, que esto no quiere decir que las mujeres sean mejores a la hora de elegir acciones u otro tipo de activos, porque descontando comisiones, ambos grupos obtienen resultados similares y ninguno logra ganarle al mercado.
Entonces ¿Son mejores las mujeres?. Es una victoria entre comillas, porque ellas caen menos en la trampa de la especulación a corto plazo, y como es casi imposible ganarle al mercado, paga mas ser cauteloso, aunque sea mas aburrido.
También está demostrado que los hombres, por un margen grande, sostienen que ellos son los mejores inversionista que las mujeres y, curiosamente, una mayoría importante de mujeres también considera que los hombres son mejores inversionistas que ellas, porque aparentan entender más de las opciones de inversión y están más dispuestos a tomar riesgo. ¿Raro no? Las mujeres obtienen mejores rendimientos pero consideran mejores a los hombres…